Cuando sientas deseos de dejarme
De una vez, me lo dices de frente
Y me dices también el motivo
Ya verás que sabré agradecerte
No te vuelvo a estorbar en la vida
Aunque sienta deveras perderte
Vale mucho que estemos de acuerdo
Quiero todo muy bien entendido
Si tu amor es deveras sincero
Yo también he de serlo contigo
Y el que juegue con cartas marcadas
Que le toque sufrir el castigo
No ha de haber una gota de llanto
Del amor que de mí se despide
No es orgullo ni nada de nada
Pero puede que nunca me olvides
Échenle, mis Rieleros
Qué bárbaros
Y no me rajo, primo Manolo
Aunque adrede me lo hagan
Pos, ¿qué no?
Hay un dicho que tal vez conoces
Y me queda a la pura medida
Porque yo al que se muere lo entierro
Y el amor que se va, se me olvida
No es que yo haya nacido de piedra
Se acostumbra uno a todo en la vida
No ha de haber una gota de llanto
Del amor que de mí se despide
No es orgullo ni nada de nada
Pero puede que nunca me olvides
