Me dispongo a viajar
sin moverme del diván.
A pesar de mis naufragios
llegaré a cualquier lugar.
Cuando llega la hora gris
prendo fuego a mi bombín.
Si lo pongo en mi cabeza
luciré como un candil.
Voy a pasear con los ojos vendados,
mientras se desata la tempestad.
Me voy a tumbar en la playa perfecta
de un verano antiguo y sin final.
La tormenta, la tormenta empezó,
pero en mi cara, en mi cara brilla el sol.
Brilla el sol, brilla el sol.
Queridísimo doctor
más calmante por favor.
Mi latido es un disparo
mi mirada una inyección.
Toda la ciudad esta ahora callada,
todo permanece flotando en paz.
Ya podéis lograr dar millones de vueltas
y os daré en el ojo del huracán.
La tormenta, la tormenta empezó
pero en mi cara, en mi cara brilla el sol. (x2)
Brilla el sol, brilla el sol,
brilla el sol, brilla el sol.
