La calle sigue penando
La niña que ya no está
Los perros solos se duermen
Perdidos en la ciudad
Si pasa alguna muchacha
La quieren acompañar
La escoltan hasta su casa
Desean verla llegar
La noche es la prisionera
Del alma de la maldad
Cuando el peligro se cierne
No hay dios que quiera escuchar
Historias de las trincheras
Imperios de soledad
Ni un ángel, ni primavera
Ni compasión, ni piedad
La calle sigue penando
A niñas que ya no están
La sangre sabe que el tiempo
No cura a la soledad
El canto de la muchacha
Que ya no se ve pasar
Los perros ya no la esperan
Sus huellas se borrarán
Y llegarán las muchachas
Que nunca la olvidarán
Se encontrarán en su nombre
Su canto reclamarán
Será una hoguera de abrazos
Nadie las podrá quebrar
No habrá peligro en la noche
Descansará la ciudad
No habrá peligro esta noche
Descansará la ciudad
